Producto obtenido de ajos maduros, frescos y de primera calidad.

DESCRIPCIÓN.

El ajo es una planta vivaz y bulbosa de 50 cm. La parte aérea está formada por hojas alargadas de sección cilíndrica y, en la floración, por un conjunto de flores apicales de color blanco rosáceo.

Los ajos se lavan y recortan, después se pelan, procediéndose a continuación al secado y, por último, se granulan.

CONSERVACIÓN.

Mantener en lugar fresco y seco, alejado de fuertes olores y fuentes de contaminación.

DECLARACIÓN DE ALÉRGENOS.

NO contiene GLUTEN como ingrediente, pero no se puede garantizar la ausencia de trazas.

Alérgenos: Sulfitos.

Por contaminación cruzada puede contener TRAZAS de apio, frutos secos, mostaza y sésamo.

USOS TRADICIONALES.

• Antiséptico. Durante la Edad Media, los ajos se usaron como remedio contra las epidemias o contra la peste debido a su acción frente a microorganismos patógenos.

• Vermífugo. Desde tiempos muy antiguos se ha conocido esta propiedad del ajo, usándose especialmente contra los oxiuros, que originan el prurito anal de los niños.

USOS ACTUALES.

• Embolias. El aceite esencial de ajo tiene la propiedad de ser un antiagregante plaquetario y, por ello, previene y actúa contra la formación de coágulos internos.

• Problemas bronquiales. Al ser expectorante, se usa para fluidificar las secreciones mucosas de los bronquios.

• Sistema locomotor. Se ha observado que el ajo tiene la propiedad de disolver el ácido úrico depositado en los músculos y articulaciones, combatiendo la artritis reumatoide, la artrosis, el lumbago y la gota.

• Sistema urogenital. Las curas de ajo se usan como tratamiento de enfermedades urinarias y afecciones genitales como cálculos de riñón, espermatorrea, esterilidad, frigidez y quistes ováricos.

CONSTITUYENTES.

• Aceite esencial.

• Fructosanas.

• Enzimas.

• Adenosina.

• Sales minerales.

• Vitaminas A, B1, B2 y C.

EFECTOS PRINCIPALES.

• Relajante cardíaco.

• Antiséptico.

• Antibiótico y fungicida.

• Expectorante.

• Hipocolesterolemiante.

• Anticoagulante.

• Hipoglucemiante.

• Vermífugo.

PARTES UTILIZADAS.

Se utilizan los bulbos de la planta.

PREPARADOS Y APLICACIONES.

• Lavativas. Se hace una infusión de 6 a 10 dientes de ajo en 1 litro de leche. Se aplica como lavativa, para combatir las lombrices intestinales.

• Diente de ajo macerado. Se pueden tomar de 2 a 3 ajos al día. Se dejan macerar en una botella de whisky durante dos meses. Especialmente indicado para problemas reumáticos y úlcera gastroduodenal.

• Aceite de ajo. Se vende en establecimientos especializados a modo de cápsulas o perlas. Puede ser un buen sustituto al ajo crudo cuando se quiera evitar su intenso olor en la boca.

• Extracto fluido. 20-30 gotas al día.

ADVERTENCIAS.

No debe utilizarse en casos de hipertiroidismo y hemorragias activas. Puede provocar dermatitis de contacto. En su forma cruda puede afectar al estómago en caso de úlceras gastrointestinales.